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It was the European cultural capital in 2007. The Old Town of Sibiu retains the grandeur of its time when regional trade was rich and powerful. Like Sighisoara and Brasov, it has a distinctly Germanic feel. In the city of Sibiu the medieval walls still protect the historical area, the narrow streets, passages and buildings from the 17th century.

For hundreds of years, this walled town in the heart of Transylvania was one of the most powerful and prosperous fortresses in Europe. Surrounded by imposing walls, Sibiu's original fortifications included 39 defensive towers, five bastions, four gates, and five artillery batteries. First mentioned in 1411 as a grain market, the Piata Mare (large square), the largest square in the city, has been through the centuries a witness to live merchant activity, assemblies and even public executions. Located in the heart of the old walled city, the square was designated an architectural monument by UNESCO and features some of the most impressive buildings in Sibiu.

Carefully restored, the city houses the Samuel Bruckenthal Museum of Art, opened by the former Governor of Transylvania in 1817, with masterpieces of universal painting (Antonello da Messina, Boticelli, Titian, Rubens, Jan Van Dyck, Memling and Breugel).

From the 1860s onwards, Sibiu became the settlement of the Metropolitan Bishop. The city is still considered the third of the important centers of the Romanian Orthodox Church.

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Ha sido la capital cultural Europea en 2007. El Casco antiguo de Sibiu retiene la grandiosidad de su época cuando el comercio regional era rico y poderoso. Como Sighisoara y Brasov, tiene un sentimiento claramente germánico. En la ciudad de Sibiu los muros medievales protegen todavía el área histórica, las calles estrechas, pasajes y edificios de siglo XVII.

Durante centenares de años, este pueblo amurallado en el corazón de Transilvania fue una de las fortalezas más poderosas y prósperas en Europa. Rodeado de muros imponientes, las fortificaciones originales de Sibiu incluyerón 39 torres defensivas, cinco baluartes, cuatro puertas y cinco baterías de artillería. Primero mencionado en 1411 como un mercado de grano, el Piata Mare (plaza grande) plaza más grande en la ciudad, ha sido a través de los siglos un testigo de la actividad viva de mercadero, de las asambleas e incluso las ejecuciones públicas. Localizada en el corazón de la ciudad amurallada vieja, la plaza fue designada como monumento arquitectónico por la UNESCO y presenta algunos de los edificios más impresionantes en Sibiu.

Cuidadosamente restaurada, la ciudad alberga el Museo de arte Samuel Bruckenthal, abierto por el ex gobernador de Transilvania en 1817, con obras maestras de la pintura universal (Antonello da Messina, Boticelli, Tiziano, Rubens, Jan Van Dyck, Memling y Breugel).

Desde los 1860 en adelante, Sibiu llegó a ser el asentamiento del Obispo Metropolitano. La ciudad es considerada todavía como el tercero de los centros importantes de la Iglesia Ortodoxa Rumana.